Son pocos los Hombres…

Son pocos los hombres que dan ejemplo a futuras generaciones, aquellas que renuncian al egocentrismo y la megalomaní­a; son pocos los hombres que con un corazón abierto al dialogo siguen cumpliendo el decálogo entregado por Dios a Moisés en el Monte Sinaí­, aquellos que pudiendo tenerlo todo se privan para dar el ejemplo que con madurez y decisión mostrando así­ que se puede salir del montón humillándonos voluntariamente el corazón. Desde que yo tengo memoria vivimos siempre la misma historia de familias afectadas o alienadas por sus determinaciones.

Son pocos los hombres que se atreven a luchar contra corrientes de muerte como es el ateismo y el marxismo que a muchos hoy dí­a nos tiene viviendo en una verdadera pesadilla no solo por estar de moda hoy dí­a sino por su consecuencias atroces que grita justicia dando voces pero en realidad lo que desean imponer una falsa y manoseada libertad, olvidando nuestros sí­mbolos patrios, publicitando y promoviendo lo que el mundo entero esta viviendo , dictaduras de todo nivel que a los polí­ticos amarran con el mismo cordel , el precio de los combustibles a cambio de bienes comestibles como lo son el arroz y los frijoles , la última alternativa para llegar a terminar con el alma destruida . Son pocos los hombres que todaví­a oran al único Dios verdadero a quien en ocasiones se le acusa hasta de mandarnos mal agüero  ignorando que lo que esta pasando es producto de nuestra actitud para con el prójimo pues el ordeno que nos amaramos los unos a los otros no importando su raza, credo o religión. A través del amor dejamos todos de ser del montón.

Son pocos los hombres en quienes encuentro verdaderos mentores aquellos que nos mueven el piso con solo pensar y decir como fue que lo hizo, los que todaví­a se levantan temprano pensando primero en el bienestar de sus hermanos, los que no escatiman esfuerzo para aportar a todo mundo por lo menos un almuerzo de no lograrlo con esfuerzo por lo menos sus derechos no le tuerzo.
Son pocos los hombres que han marcado la historia de mi paí­s y si tu eres uno de ellos cuida tus convicciones pues es un mundo lleno de tantos matices cuesta mucho mantener nuestras raí­ces.

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