Jesús les dijo: Confíen en Dios. Marcos 11:22
Winston Churchill rebosó de alegría y dijo ¨Hemos ganado la guerra… Nadie puede decir cuánto durará la guerra ni de qué manera terminará. Ni tampoco me importa en este momento… Estando saturado y saciado, con emoción y sensación; fui a la cama y dormí el sueño de los seguros y agradecidos¨, cuando Estados Unidos de América ingresó oficialmente a la Segunda Guerra Mundial, como un aliado de la Gran Bretaña.
Quedé sorprendida de la confianza que la Gran Bretaña tenía en el apoyo militar de los Estados Unidos. Incluso sin que se vislumbrara el final, Churchill creía que esto podría inclinar las posibilidades a favor de los Aliados. Su fe demostró estar bien situada. Los Aliados salieron victoriosos, tres años después de la declaración de Churchill.
Cada vez que estés desanimado o desanimada y quieras ceder ante el pecado, recuerda que Él ha resucitado, al haber conquistado la muerte. Podemos ¨dormir el sueño de los seguros y agradecidos¨.
No te puedes perder:La seguridad de quienes somos en Jesús
Publicar un comentario